martes, 22 de noviembre de 2011

¿Qué hacer con esa pena?

Las penas son una parte normal de nuestra vida, sucesos que golpean nuestra alma, y que dan el desafío de cambiar y aprender para luego superarla.
No es algo que podamos desear que sucedan hechos que nos lastimen, pero su parte buena está en la enseñanza que proporcionan una vez superado el suceso que nos provocó la pena.
Es muy dañino sostener en el corazón esa pena como una forma de retener el recuerdo de algo que ya no podrá ser más. No es por continuar sufriendo por un hecho doloroso que ese hecho se va a revertir y volver al pasado que se añora.
En la vida hay procesos que se inician y que en algún momento deben terminar, no son todos, pero muchos terminarán.
Dado que el objetivo de nuestra Alma al encarnarse en el cuerpo que ocupamos, es cumplir un ciclo de vida en la cual experimentará varios sucesos que provocarán importantes cambios en ella, y así poder aprender y crecer. Para el Alma son una suma de experiencias que debe cruzar por ellas, en casi todas habrá sufrimiento temporal, pero el aprendizaje del suceso será permanente, atesorado por el alma; luego con el tiempo el dolor cederá, hasta que finalmente desaparece.

Aquel que se aferra al sufrimiento, es porque su Ego lo provoca, es quien pretende eternizar una situación que ya no es favorable para sí mismo y no sólo se impide aprender de esa situación sino que además al atarse al pasado con su negación solo logra mantener el dolor.
Es como si una habitación hubiera perdido su piso y la persona se agarra a su ventana para no caer, sufrirá colgado a ella pero el piso ya no estará más, será tiempo de abandonar esa habitación.
Entonces, ¿Qué hacer con la pena?, observar todos los detalles de la misma, porqué duele, que puntos toca dentro del mismo ser, permitirse mirar con absoluta honestidad que se hizo mal para llegar a ella y luego girar la vista hacia delante y seguir avanzando en la vida.
¿Qué afecta esa pena en tu ser? 
¿El orgullo? 
¿La razón al punto de no permitir pensar? 
¿Duele el corazón? 
¿La soledad te oprime?... 
Pueden ser muchos otros dolores, pero, todo es causa de aferrarse a un pasado, y por lo tanto pasó. 
¿Qué queda entonces? 
Memorias, pero el gran significado de ellas está en poder observarlas muy bien, con el gran objetivo de encontrar en ellas enseñanzas. Y es importante aceptar que aunque luego de haber aprendido, tanto tú como las otras personas, ya estarán en senderos diferentes, los caminos se separaron.
Crecer es bueno pero  el precio que se paga muchas veces es la separación de otros seres queridos, al menos por un largo tiempo. Pero el tiempo no tiene significado para el alma.

No es obligatorio sufrir para aprender, pero si el Ego está aferrado a la experiencia, no queriendo soltar, sufriremos.

Crecer no es una opción para cada persona, si no creces tú, por estar aferrado, no evitará que otros lo hagan y entonces más sufrirás aún.
Hay que tener en cuenta que en este mundo, todos, venimos a aprender.
Constantemente nos cruzamos con otros seres en nuestro diario caminar, pero el destino de cada caminante es individual, cada persona tiene sus propias lecciones que aprender y por lo tanto deberá recorrer otros caminos en el futuro; es circunstancial por lo tanto que caminemos juntos por algún tiempo en esta vida, en algún momento las personas se separarán. 
Los padres deberán resignarse al partir de sus hijos, también deberemos prepararnos para la partida de nuestros padres al final de sus vidas.
Las relaciones de parejas no todas están destinadas a vivir juntos para siempre o quizás por muchos años. Pero si hay algo que puede servir para evitar un dolor, desde los inicios de una relación de pareja es muy importante prestar atención a cuales son las expectativas de camino que desea seguir la futura pareja en su caminar por venir, si los caminos de ambos son compatibles entonces hay posibilidad de que se sostenga esa relación por mucho tiempo. En caso contrario en un futuro próximo se separarán y si insisten en seguir juntos al menos uno de ellos no crecerá, pues seguirá el camino del otro, o peor aún, sufrirá inútilmente.

Nadie avanzará en su camino, aferrándose a lo insostenible.
Imagínese que, tenemos cien personas hoy juntas en un lugar, digamos se realizó una reunión de amigos los cuales todos siguen caminos espirituales.
Cada persona es distinta a las otras, eso es inevitable. Ninguna de ellas llegará a la misma meta, sobre todo porque la meta que cada uno se imagina o desea o puede llegar, es distinta. Cada persona tiene aptitudes distintas, habilidades diferentes, sus capacidades personales.
A partir del siguiente día cada uno inicia su camino, que supuestamente, es muy parecido al de sus amigos, entonces podríamos observar una partida de cien líneas paralelas, sin embargo con el transcurso de los días, habrán líneas que se van separando de otras, de esa forma se irán abriendo como en un abanico. Pero habíamos dicho que todos van en su camino espiritual, ¿porqué tienen que separarse? Pues cada uno es único y no puede avanzar en su camino espiritual si sigue el sendero del otro.
Sin embargo cada uno tiene sus verdades, pero al final las verdades se juntan en un nivel superior. El destino espiritual traerá encuentros y separaciones, reencuentros y nuevas separaciones, las almas que se aman siempre se encuentran el tiempo no importa. 
Si dos personas se amaron en esta vida, en la próxima volverán a encontrarse con sus nuevas realidades, cada una mejorada, y cuanto más hayan avanzado cada una es más posible que puedan compartir más tiempo juntas en la próxima vida.

Y una vez más, ¿Qué hacer con la pena?, superarla para crecer.

Un abrazo para todos, Paul Barbé

lunes, 14 de noviembre de 2011

9 preceptos

Hoy quiero compartir estos preceptos, a mi entender buenos para aquel que lucha por avanzar en su sendero de crecimiento espiritual.
  • ·       No vivas en la persecución de bienes, se libre de espíritu y de cosas.
  • ·        No camines comparando tu avance con el de otros.
  • ·        Intenta siempre guiarte por la voz de tu alma y los mejores sentimientos de tu corazón.
  • ·        Se fuerte para luchar, paciente para esperar, usa tu alma para decidir qué hacer.
  • ·        Busca refugio diario en el Templo de tu silencio interior.
  • ·         Respeta la individualidad de cada persona sin importar quién esté más acertado.
  • ·         Cuida tus palabras y expresiones, si no puedes hacer el bien es preferible no hacer ni decir nada.
  • ·         En esta vida las únicas dos cosas importantes son, aprender a amar y acumular sabiduría.
  • ·         Haz el esfuerzo diario por ser mejor que tú mismo teniendo en cuenta lo anterior.

El camino del buen destino puede seguirse cuando el caminante es libre como ser único, sin depender del rumbo de otras personas y tampoco de la necesidad de cosas materiales.
No hay competencia para tu crecimiento espiritual, cada uno tiene su karma por superar y sus capacidades personales para enfrentar su sendero, no es útil compararse con otros pues cada camino es único.
Nunca te guíes por indicaciones de otros para decidir tu camino, los susurros del Alma son muy tenues para escucharlos,  sólo los interpreta el corazón, si prestas oídos a otros o a tu Ego errarás tu camino
La mente deberá ser educada con el tiempo a servir al corazón utilizando su inteligencia a su servicio.

Los logros importantes son aquellos que hay que sostener una lucha firme para alcanzarlos, pero sólo aquellos que puedes por ti mismo lograr, teniendo paciencia y sabiduría para dejar de lado luchas vanas y de ello te darás cuenta por los susurros de tu Alma.
En cada día el caminante debe buscar refugio en su silencio interior para encontrar sus propias verdades, comprender sus verdaderas necesidades y decidir el camino a seguir el próximo día.
Cada persona va por su camino personal, no es el tuyo, ni aquel seguirá el tuyo, solo debes estar dispuesto a dar lo mejor de ti a los demás cuando te lo piden, luego dejar que cada uno siga los pasos que su corazón le indique.
Por ello cuida mucho tus palabras, busca alcanzar la libertad de la crítica, no culpes jamás a los demás por tus carencias, ayuda si puedes y luego deja a los demás caminar.
De todas las cosas que harás en esta vida te traerán muchas cosas, serán tuyas temporalmente, luego tu Alma dejará este cuerpo para viajar a un plano superior, lo único que se llevará será el amor que cultivó y todo aquella sabiduría que atesoró.

Es un deber de cada individuo evolucionar, y por ello deberá siempre intentar ser mejor, que sí mismo, de esta forma podrá superar las lecciones que el Gran Espíritu le encomendó en esta vida. 
Y así el día que termine tu pasaje por este mundo tendrás la paz de haber hecho tu mejor esfuerzo.

No quiero hoy extenderme en reflexiones sobre estos nueve preceptos, dejo a Ud. Lector que medite sobre ellos, espero de corazón que sean de utilidad.

Un abrazo sincero a todos, Paul Barbé

sábado, 5 de noviembre de 2011

El valor de las cosas

Es muy extraño para mí ver como la mayoría de las personas valoran las cosas en la vida.
Es tan común que una persona tenga una bella familia y no aprecie su maravilloso valor, no muestre su cariño a sus hijos o padres y luego cuando estos estén por partir, sufra y extrañe. 
Se ve tantas veces que las personas tengan cosas y no las valoren, incluso las desprecien por anticuadas o usadas, y si un día se rompen se lamenten.
Todos los días se puede ver, que las personas se quejen de sus trabajos, por muchas razones, pero si un día pierden ese trabajo a partir de ese momento comienzan a ver todo lo bueno que tenía.
Ahora bien, algo muy similar ocurre con lo que puede venir a partir de ahora hacia delante. Tan común como lo anterior son las siguientes situaciones…
Padres que le repiten a sus hijos años que deben estudiar con el mayor de los esfuerzos, pues en su juventud son los mejores años para estudiar debido a que ellos, sus padres, pueden darles su sustento mientras ellos avanzan en sus estudios y que estos serán la base para el resto de sus vidas. Sin embargo, cada vez se ve más que los jóvenes pongan menos y menos empeño en estudiar y por lo tanto menos esfuerzo por su propio futuro.
Personas que han acumulado peso debido a sus malos hábitos alimenticios y a su sedentarismo, aceptan como válido la publicidad que les vente objetos de gimnasia mágicos y que pronto se verán como los modelos que observan en su televisor. Saben en su interior que no es así, sin embargo están habituados y convencidos al mismo tiempo a que con dinero todo se resuelve, y por lo tanto si el aparato de gimnasia es muy caro debe ser bueno y por lo tanto “piensan, me veré bien en poco tiempo”. Entonces una vez que lo haya comprado, luego de haber pasado unos días, cuando por fin lea con atención el manual del aparato y comprenda que deberá realizar una rutina diaria de ejercicios y que también deberá modificar sus malos hábitos alimenticios, llegará a la conclusión que le cobraron un disparate por un aparato que no es bueno.
Muchos trabajadores de empresas reciben la oferta de realizar cursos de capacitación, y se entusiasman en poder alcanzar un salario mejor con una posible promoción, pero apenas comienzan el curso de capacitación pierden el interés pues se les pide que dediquen parte de su tiempo fuera del trabajo a estudiar. Esforzarse en lugar de descansar, entonces el curso es abandonado.
Por ello cada vez más se ven promociones de cursos de un solo día, es apenas lo que la mayoría de la gente está dispuesta a invertir de su tiempo. Pero todos estos cursos de un día, si son honestos al finalizar entregan un disco con mucha información, en la cual se dan guías para poder seguir profundizando sobre ese tema. Hasta ese punto llega la mayoría, hizo el curso, y luego deja el disco en un cajón olvidado. No más esfuerzos.
Recuerdo la historia que me contaron de Mikao Usui y Reiki, cuando en 1996 participé en el seminario de dos días de mi grupo de iniciación en Reiki, Usui luego de muchos años de esfuerzo e investigación descubrió los orígenes del Reiki y luego de ello quiso entregarlo a la gente. Decidió irse a vivir a los barrios pobres de Kyoto para enseñar Reiki a la gente pobre para que ellos mismo pudieran tratarse, sanarse y mejorar su vida. 
Luego de algunos años, comenzó a cruzarse en las calles de esos barrios a antiguos alumnos que el había curado, educado y enseñado Reiki, les preguntó que estaban haciendo de nuevo en los barrios pobres como mendigos siendo que habían recibido educación del monasterio que el los había llevado, se les había enseñado un oficio, etc. Con decenas de personas que había re-encontrado se repetía la situación. 
Mikao Usui pensó que había fracasado en su misión. Sin embargo un tiempo después de haber vuelto al monasterio a meditar llegó a la conclusión que; las personas solo valoran lo que reciben cuando deben dar algo valioso a cambio. Si reciben un saber por nada no le dan valor pues a cambio no dieron nada.
Sin embargo hoy día, casi un siglo después nos encontramos con que la mayoría de las personas en estos tiempos, no están dispuestos a esforzarse por casi nada y tan solo queda pagar con dinero por las cosas, cuando más pagan, piensan que será más valioso lo que reciben, pero ni bien pagaron por algo, están pensando reunir más dinero para pagar por lo que sigue en su lista.
No hay cosas valiosas en la vida que no lleve esfuerzo lograrlas.
Una carrera universitaria lleva varios años de dedicación y muchos exámenes a aprobarse para obtenerla.

Una buena educación de un hijo lleva muchos años, cientos de conversaciones y explicaciones del porqué de tantas cosas, una dedicación hacia ellos incondicional, cuidado, cariño, respeto, y así luego de dar lo mejor estará la posibilidad de tener un hijo bien educado.
Un artesano llevará años de trabajo para alcanzar su maestría.

He escrito muchos artículos sobre el camino espiritual, he dado variados consejos sobre como encontrar caminos para avanzar. Hoy quiero solo agregar esto, para avanzar hay que dedicarse, cada día. Hay que dedicarse con convencimiento y sin contradicciones, no se puede avanzar en el camino espiritual y ser un ladrón o ser un empresario despiadado con sus empleados, etc.
Alcanzar un nivel espiritual elevado no está asociado a pagar mucho dinero a su maestro espiritual, ni tampoco por pagarle varias veces por año por seminarios, retiros o guías especiales; no es por pagar por ello que se avanza, será provechoso si todo eso, siempre que vaya acompañado con mucho trabajo de horas de dedicación. La guía es valiosa para saber hacia donde caminar, pero los pasos los debe dar el alumno no el maestro.

Avanzar en el camino espiritual es posible sólo con un esfuerzo sincero y diario. Es una de las cosas que en la vida no se pueden comprar con dinero.
Cuando más adelante queremos llegar, mayor deberá ser el compromiso. En los escalones más elevados del camino espiritual el compromiso no es sólo con uno mismo en esforzarse por mejorar sino buscar como hacer para ayudar a otros a que lo hagan.

Mis artículos no tienen valor en dinero, pues como ven no hay publicidad en mi Blog, o sea para ustedes mis lectores el precio está en el esfuerzo que deberán realizar para crecer espiritualmente, y para mí el precio es dedicar mi tiempo es escribir mis artículos pues es parte de mi camino espiritual.

Un abrazo desde la distancia a todos mis lectores, Paul Barbé.

domingo, 30 de octubre de 2011

Elección de vida

Es parte de todos los seres humanos, su plano espiritual.
Muchas personas pretenden desatender esa parte de su ser puesto que consideran que: 
  • Es una pérdida de tiempo, hay muchas cosas más importantes y reconfortantes que hacer. 
  • No pueden realizar un proceso espiritual dentro de un mundo que los obliga a ser competitivos.
  • No tienen Fe suficiente para sostener el intento dedicar tiempo al espíritu. 
  • Su religión no es compatible con los caminos espirituales que se sugieren, o sea que lo que distintos maestros o guías espirituales dicen, va en contra de lo que su religión le indica hacer.


Puedo decir que todas esas respuestas son excusas, y también que ninguna persona logrará sentirse plena, ni logrará sentirse en paz con la vida si no realiza su propio camino espiritual.

Es muy importante que Ud entienda que no hay un camino obligatorio a seguir para avanzar en la espiritualidad. 
No hay un camino mejor que otro, el camino de Juan no es mejor que el de María, no porque Juan dedique 5 horas diarias a su crecimiento espiritual avanzará más que María con sus apenas 4 horas semanales. 
Aquel camino que hoy comienza Graciela tímidamente, rezando quizás, buscando su propio silencio en algún momento del día, es muy probable que algunas semanas después su rutina haya cambiado, y eso es la evolución lógica de su proceso de crecimiento.
Tampoco hay una receta, ni un dogma a seguir, cada persona deberá encontrar paso a paso su propio camino de crecimiento espiritual. 
En el proceso de crecimiento espiritual, cada persona debe ir descubriendo que modificar, que debe cambiar, hacia donde dedicar la mayor parte de sus esfuerzos, para crecer. 
Nunca será hacia aquel camino que le indique, ni un sacerdote, un pastor, un maestro espiritual, ni su madre, deberá encontrarlo el 
propio caminante, aquel sendero que esté más adecuado al momento de su vida, a la realidad de su capacidad de encontrar su propia paz interior.

La dimensión espiritual es el centro del ser, por ello debemos un compromiso en mantenernos en contacto con nuestra esencia, y desde ese contacto aceptar cada uno de los aspectos de nuestra persona, no volvernos enemigos de nuestra forma de ser hoy, sino buscar los caminos para mejorar, sin ningún compromiso de cambio ni exigencia de otro.
Es una necesidad interna el cambiar para mejorar, pero antes de pensar en cambiar, desde un contacto con el espíritu, con la paz interior encontrar el porqué hay que cambiar aquello, y entonces así es más fácil tener una motivación para cambiar, pues el cambio a realizarse lleva un proceso quizás largo, de trabajo diario y sólo manteniendo en la mente, el porqué hay que cambiar es posible sostener ese esfuerzo.
Serán necesarios muchos pequeños cambios internos, para que la misma persona pueda ver la diferencia clara entre el presente y su estado antiguo. Todo lo espiritual es sutil, además no es posible, en términos generales, realizar grandes cambios en pocos días.

Los grandes cambios interiores en el plano espiritual, si son posibles de realizarse, pero estos llegan luego de experiencias fuertes que conmocionan a todo el ser, situaciones duras que obligan a realizar grandes cambios en el diario vivir, son aquellas que se sale adelante cuando la persona se permite 
soltarse al plano espiritual y desde allí encuentra el camino de salida del pozo donde se encuentra.

Volviendo a la individualidad del camino espiritual, es lo que hace tan difícil escribir consejos para otros en este plano, puesto que podría yo escribir en base a mi experiencia, un bonito camino espiritual, que por supuesto para mí mismo funcionaría muy bien. 
Es decir si miro hacia atrás en mi vida, podría ahora decir, debí empezar con estos pasos diarios, luego al mes agregar estos más, y así generar una rutina de mayor compromiso espiritual y entonces con toda esa receta tan detallada en vez de demorar los 15 años que he pasado en mi camino espiritual habría recorrido o llegado al mismo punto en digamos 3 años.
Pero ni siquiera para mí mismo funcionaría, puesto que los mismos errores que cometí en esos 15 años, los muchos eventos difíciles que me sucedieron en ese tiempo fueron los que ayudaron o hicieron posible mi crecimiento.
Pudieron haber sido años más provechosos, quizás sí, pero no hay una competencia a quien deba superar...

Cada paso lleva a cambios, cada cambio a nuevas situaciones, cuando más cambios más situaciones nuevas llegarán y por lo tanto habrá que aprender a superarlas. Lo único cierto en toda esta incertidumbre es que cuando más horas y más días en la semana dediquemos al crecimiento espiritual, más avanzaremos, pero al mismo tiempo, no podemos tensar la cuerda al punto de arriesgar que se rompa. 
No es muy aconsejable pretender en avanzar espiritualmente a ritmos muy rápidos, puesto que eso lleva a cambios en la vida diaria de los cuales quizás no estemos preparados.
Por otro lado, caminar muy lento en lo espiritual es también desaconsejable. 

Mucho más aún aquellos que dicen o se justifican en no tener Fe y se niegan a realizar su propio camino espiritual, con excusas como empezaba este artículo. Esas personas con el pasar del tiempo  comenzarán a sentir un vacío tan insoportable que no encontrará nada en la vida que lo llene.

No hay ninguna obligación por parte del mundo a que una persona recorra su propio camino espiritual, pero el espíritu está allí dentro de usted, esperando que su mente ayude. 
Si su Ego pretende ser quien dirige su existencia y esclaviza a su mente a obedecer sus caprichos y deseos, entonces su Alma aprisionada sufrirá un dolor constante y seguramente con el tiempo su cuerpo será quien mostrará muchas dolencias, o enfermedades.

La pérdida de paz interior es el resultado de desatender el plano espiritual, si no hay paz interior, no habrá nunca vida satisfactoria, pero bien, cada persona elige su camino.


Un abrazo a mis lectores, hasta la próxima, Paul Barbé

lunes, 10 de octubre de 2011

Caminar en silencio

Sucede  a veces que no se logra frenar la mente para alcanzar un momento de paz profunda. La mente divaga en muchas cosas y ni siquiera nos permite enfocar en un tema en particular solo quiere vagar, saltar de recuerdo en recuerdo, de un problema a otro, muchas ideas y ninguna.
Acaso has estado en un estado de ansiedad que no tiene explicación, pues nada es adecuado para hacer y cuando no se hace nada se siente que algo se debe hacer, entrándose así en un circulo sin fin.
Siempre vuelvo a la vieja solución que encontré cuando caía en estos estados, caminar. 
Ha sido una solución mágica para mí, pues al caminar la mente se distrae y entonces poco a poco voy recuperando mi paz, la mente “suelta” mi conciencia y así puedo ahondar en mi paz interior.
En las caminatas del silencio logro separar mi ser de todo lo superfluo e invasivo del mundo consumista. Pues en el caminar por los senderos del mundo real no se encuentran todas aquellas fantasías que se pretenden imponer por repetición.
Así como he escrito anteriormente sobre el retorno a la esencia; el caminar del silencio es su complemento y el retorno a la paz interior una necesidad. 
También he escrito antes que no es solución buscar aislarse del mundo, pues tarde o temprano debemos “volver a él” y por falta de hábito de enfrentarlo perdemos la paz lograda.
El desafío espiritual es vivir dentro del mundo competitivo, consumista e invasivo, nos llueven noticias y comentarios que impulsan a nuestra mente a proyectarse hacia el mundo exterior.
El desafío es entonces, mantener la esencia individual, la salud y la paz interior, aún en los peores sitios. 
Por más que parezca imposible mantener la paz frente a tantos ataques de la gente, de situaciones invasivas, de trabajos que empujan al límite el esfuerzo de no dejar de ser uno, en la lucha para no ser pasado por encima por aquellos que no tienen respeto por los demás, que mienten y  que nada les importa lo que quiten a otros. 
Justamente es parte del desafío espiritual en el momento histórico en que nos encontramos.
Estamos en el final de una era, donde un cambio está por llegar; en ese momento se separará la semilla de la paja, como dice la Biblia. Aquellos que hayan logrado sostener su integridad, y más aún cuidar su propio camino de crecimiento espiritual, serán los que estén preparados para el nuevo mundo que vendrá.
Caminar en el silencio entonces, todas las veces que sea necesario, es algo que recomiendo con un gran convencimiento de mi parte. Caminar y en ese sendero elegido ir soltando las cargas innecesarias que otros nos han colgado en nuestra mochila.
Sugiero un caminar ágil, si es posible un ejercicio que logre cansar al cuerpo, pues en el esfuerzo sostenido del caminar, la mente se concentra en el esfuerzo y dejar de molestar a la conciencia. 
El ejercicio proporciona salud, y la conciencia libre, cura la mente. Y luego al retornar al hogar, luego de un baño reparador, minutos después se puede disfrutar una hermosa paz; y allí estaremos en el momento mágico para reencontrarnos con nuestra alma, para bañarnos con su luz. 

En ese momento de paz, nuestra plegarias serán muy fuertes y retumbarán dentro de nuestro ser.

Tengan Fe en mis palabras, Caminen en silencio, caminen rápido, luego disfrutarán aún cansados de una paz revitalizante.

Un abrazo a todos, Paul Barbé

jueves, 6 de octubre de 2011

Despertar en el Alma

Cuando vuelvo a leer mis artículos, siempre me queda la sensación de no haber logrado expresar una parte de la esencia que deseaba compartir. Todo lo espiritual es grandioso y al mismo tiempo difícil de tomar con las manos y también de expresarlo para otras personas.
Quizás porque cada profunda experiencia espiritual es única, quizás porque ella es accesible tan solo a esa persona y quien la lee o escucha no accederá a ella sino a la suya personal en su momento adecuado.

Apunto entonces especialmente a reiterar esa unicidad de camino de cada persona, todos los ejemplos son válidos, pero deberán ser tomados como una referencia, quizás como una inspiración, pero nunca un caminante deberá imitar los pasos de otro caminante, ni aún de un maestro.
(puede suceder que a ese maestro le reste tan sólo una lección por superar, mientras que el alumno ya superó justo esa, teniendo muchas otras diferentes aún por superar).

Si tomamos el concepto del Karma, idea muy conocida en todo el mundo, cada caminante tiene una historia que aún no resolvió, pues si hubiera resuelto todo su karma ya no tendría necesidad de seguir viviendo esta encarnación. Entonces un caminante busca avanzar en su sendero espiritual, al mismo tiempo que debe ir curando su interior, sanando su karma, deberá vivir las experiencias que aún le falta resolver para aprender; y es por eso que el camino será único para cada persona, pues son muchos los perfiles individuales a mejorar.
Cuando se habla de iluminación, a mi modo de entender la esencia de la espiritualidad, iluminación significa buscar alcanzar la profundidad del alma, dado que el alma es pura y eterna, su luz es la que debemos alcanzar.
Parecería más fácil entonces, alcanzar la luz interior que la luz de Dios, pero paradójicamente es lo mismo, pues quien alcanza su luz interior, su iluminación, al mismo tiempo accede a la luz de todo el Universo, pues todas las almas parten de la esencia de Dios y por lo tanto, en definitiva todos somos Uno, la diferencia está en el tiempo que llevará a cada uno alcanzar su iluminación.
Es entonces que el trabajo diario del caminante espiritual se divide en muchas tareas, el buen caminante no debe detenerse mucho tiempo en ninguna, pero tampoco hay una exigencia de tiempos, sino que crece la necesidad interior a medida que se avanza a desear volver a casa, a la casa de Dios, el retorno a la luz.
Despertar del alma, es posible cuando el caminante acepta su trabajo diario espiritual, y por lo tanto aunque no se vea claramente hacia donde  camina, aún así  siente en su interior cuando camina hacia rumbos correctos o si se está desviando o recorriendo círculos que lo traerán de nuevo al mismo lugar un tiempo después.
Lo importante en el sendero espiritual, es que no hay exigencias de otros, cada uno, traza sus metas, y si es honesto consigo mismo, se marcará senderos que sea capaz de transitar, y también entenderá que cada meta llevará todo un proceso de cambio personal y un tiempo para lograrlo.
Pero el caminante convencido, ese que cada día hace su mejor intento no se permite caer en la desazón por no poder cumplir con plazos planificados, sino que se sentirá feliz por algo tan sencillo y tan grandioso como mantenerse caminando de acuerdo a sus fuerzas y por lo tanto cambiando sus piedras interiores por joyas relucientes.

Espero humildemente haber logrado inspirar al menos a alguno de mis lectores, un abrazo a todos, Paul Barbé

PD: para aquellos que prefieren el idioma inglés, tiene disponible mi Blog en ingles, aunque no tan actualizado, http://paul-barbe-engl.blogspot.com

sábado, 1 de octubre de 2011

Compromiso y curación

Hace un par de días hablaba con un compañero de trabajo de una experiencia que tuvo hace años atrás, tiempos en que el padecía de un malestar crónico en su estomago que lo había obligado a tener que tomar decenas de litros de anti ácidos a lo largo de los años. 

Según el me contaba… 
- Debo haber tomado mas de 400 litros de gel de aluminio en 10 años” 
Ambos nos reímos de la anécdota, su relato siguió: 
- Una vez vino un pastor de una iglesia (no voy a nombrar cual era), este en su conferencia dijo que todos aquellos que tenían un problema de salud levantaran la mano, lo hice, unos minutos después vino una mujer joven y se paró a mi lado.
- Luego siguió la conferencia y en un momento el pastor dijo que los iba a abrazar la persona que los acompañaba.
Sentí un escalofrío, una sensación que nunca había sentido…” 

- Esa la noche en mi casa mi esposa me preguntó si no iba a tomar el anti ácido como hacía todas las noches desde hacía tanto tiempo. 
- No me siento mal, no voy a tomar.  

Al día siguiente estuvo todo el día sin tomarlo, cosa que ya era extraño. 
Fui tres días seguidos a las conferencias de ese pastor. Pasaron los días y mi problema no solo mejoró, sino que se curó.

Después de escucharlo le comenté:
- He escuchado testimonios de otras tantas personas sobre curaciones milagrosas, o dicho de otra manera experiencias que no tenían explicación científica…  Seguramente tu también las habrás escuchado…

Luego de una pausa le comenté a mi compañero:
- ¿Sabes lo que pienso? 
- Todos los males de las personas nacen en la mente. 
El me miró sin responder, así que continué.
- Mira recuerdo cuando estudié terapia con Flores de Bach, ese hombre en su Inglaterra estudió las flores de su país y descubrió un tratamiento con sus esencias, un tratamiento que cura principalmente los problemas emocionales y mentales de las personas. 
- Con los años planteó su teoría “todos las enfermedades del ser humano, nacen de un conflicto entre la mente y el alma del ser”. 
- Mira, le contesté estoy convencido que Edward Bach estaba en lo cierto. 

Cuando una persona permite que “su cabeza” camine por cualquier tipo de pensamientos, al mismo tiempo permite que entre a su vida la enfermedad. 
Todo lo que la mente piense y luego quiera, no es lo mismo que su Alma quiere, y allí nace una lucha. 
Como la mente es la que maneja directamente el cuerpo este la obedece pero, al mismo tiempo el Alma a través del cuerpo también se comunica con malestares y dolores, que si no son atendidos llegan a ser enfermedades.

Cuando la persona reconoce sus pensamientos errados, desaparece el conflicto y entonces se entra en el camino de la curación.

Cuando uno oye relatos de curaciones milagrosas, para mí lo que sucede es que, el curador hace las veces de conciliador entre mente y Alma, las comunica, con la Luz que transmite hace que instintivamente se entiendan y por lo tanto traen la curación.

Hoy recordando esa charla me puse a pensar en todas las experiencias y relatos que había escuchado a lo largo de mi vida. Sumo conclusiones.

Recuerdo cuando terminé mi primer seminario de iniciación en Reiki en 1996, y algunos de mis compañeros que nos iniciábamos en ese conocimiento le preguntó a mi maestro:
-  ¿Qué hacemos a partir de ahora cuando nos vayamos a nuestras casas?”
- Deben principalmente hacerse auto tratamiento” contestó el maestro. 

Hoy 15 años después, habiendo pasado tantas experiencias en mi vida, concluyo cuánta razón tenía esa recomendación.
Si una persona iniciada en Reiki dedica todos los días un tiempo para hacerse auto tratamiento, está resolviendo sus conflictos internos y por lo tanto se está curando no solo su cuerpo físico, sino que principalmente curando su mente, y entonces curando sus sentimientos y emociones, como puede hacerse de otra manera con terapia floral de Bach, o con otras terapias.

Y así vuelvo a un tema reiterado en tantos artículos, todos tenemos mucho por sanar, por volver a nuestra esencia, a la vida simple, a los pensamientos simples, a aprender a agradecer y disfrutar lo que se tiene ahora, y “soltar la rienda” de que pueda pasar mañana.

Más allá de hacer o no un camino espiritual, todos debemos dedicar un momento en cada día a buscar caminos para auto curarnos, y esos caminos siempre será la misma persona que los debe transitar, no son caminos que se hagan mejor por disponer de más dinero que otros, o más tiempo libre. 

El secreto es la dedicación y el compromiso con uno mismo en auto cuidarse, en aprender a amarse, buscar la reconciliación y la paz.

Todo esto último podrán encontrar en artículos anteriores. En especial a aquellos que hayan recibido su iniciación en Reiki, ¡úsenlo en ustedes mismos! Todos los días, todos. No se busque escusas, es por su propio bien.

La auto curación es posible, el único requisito es el compromiso con uno mismo. 

Y si usted no practica Reiki, aún si no conoce ninguna técnica de sanación o terapia holística, puede igualmente observar su propio interior, atienda a sus emociones y sus pensamientos repetitivos, busque el camino para que ellos no perturben su paz o busque cómo sanar sus viejos dolores, sus viejos conflictos.
No se permita a usted mismo vivir cada día con emociones o pensamientos negativos.

Cuando más se cuide a usted mismo, más libre se verá de cosas vanas y por lo tanto al no perseguir metas inalcanzables o metas innecesarias, tendrá mucho más energía para vivir mejor.

Un abrazo para todos mis lectores, feliz fin de semana, Paul Barbé


Todos los comentarios serán bienvenidos, escribame aquí gracias
paul.barbe.n@gmail.com

miércoles, 28 de septiembre de 2011

El retorno a la esencia

Hace un tiempo me cuestionaba a mi mismo, si era que me estaba volviendo conformista o si era que estaba aprendiendo a disfrutar todo lo que tengo hoy.
Mas allá de esa disyuntiva, si puedo darme cuenta que hay tanto para disfrutar en esta vida que no es necesario luchar para ello, sino simplemente aprender a detenerse y observar en paz alrededor. 
Pero claro, ¿dónde está parado usted?, ¿en la mitad de un centro urbano? En algún lugar de una planta industrial o sumergido debajo de cientos de papeles en su oficina? O quizás en un lugar público rodeado de muchas personas hablando y quejándose...
No importa donde esté… lo que importa es que en algún momento del día usted debe buscar un lugar donde pueda llegar sin dificultad a estar calmado y contemplar lo que lo rodea.
¿Y que es todo lo hermoso que hay para ver?, niños jugando, su familia, un parque, el mar, una colina, mirar la lluvia, sus gotas caer y golpear suavemente su ventana, escuchar una música que lo haga sentirse mejor, mirar unos ojos amigos, unos ojos amados.
Todo lo bueno está disponible siempre, tan sólo hay que aprender a tener armonía interior, y no es que sea como la paradoja del huevo o la gallina primero, pues alcanzar la paz con uno mismo siempre es posible… y a partir de allí todo puede ser posible.
Toda persona debe primeramente aprender a aceptarse tal cual es, en este mismo momento de la vida, de ninguna manera uno debe permitirse pensar “podría llegar a ser mejor, y entonces sí estaré contento conmigo mismo”… NO… usted debe aceptarse ahora mismo como es, a partir de allí, trabajar para alcanzar la armonía con su interior, su pasado, su presente. 
Cuando alguien logra aceptar su realidad, su historia, a partir de allí puede pensar firmemente en alcanzar logros de superación. No sirve engañarse a uno mismo.
El camino de superación, la evolución espiritual, se puede lograr cumpliendo etapas, no es un proceso que se realiza en cualquier orden.
Para alcanzar escalones más elevados de la propia existencia, una persona debe cambiar su forma de ser, su forma de pensar y de sentir, pero para ello, primero debe aprender a conocerse desde un trabajo de profunda honestidad, observar bien adentro que es lo que hay, y entonces una vez conocido, sí, planificar como ir cambiando todo aquello que se debe corregir.
Así una persona que camina por su sendero espiritual podría ver su travesía como un circulo con varias etapas:
  • Empieza buscando su paz, 
  • Busca en su interior aquello que es más importante corregir.
  • Luego traza un plan a seguir para llevar adelante el cambio. 
  • Una vez que logra el cambio estará en un nuevo plano que le permitirá observar su interior desde una perspectiva mejor. 
  • Accede a un nuevo nivel de conciencia.
Entonces ese camino circular termina siendo un espiral ascendente que va desde un piso oscuro, a planos de gris y cada vez subirá más hacia la luz.
Volviendo al retorno a la esencia, esta es una parte del camino de ascensión, a medida que un caminante avanza en su sendero, aprende a apartarse de todo lo innecesario, pues lo superfluo es una carga que dificulta el camino. 
Cuando más y más se asciende, habrá que alivianar la mochila que se carga, y así se llega a la esencia de la vida. 
Vivir con lo esencial sin cargas ningunas, comer lo necesario, comida sana y natural, ejercitar el cuerpo, no para competir con nadie, sino para tener el cuerpo fuerte para seguir avanzando en la vida.
Trabajar solo para el bien de la familia y para ganarse la vida honestamente.
Respetar a todas las personas, respetarse a sí mismo. 
Vigilar lo que se piensa, mantener una conciencia positiva. 
Hacer ejercicios de respiración profunda, cantar mantras para elevar la vibración o sino orar, diariamente, pero con toda la conciencia puesta en cada palabra que se dice, y finalmente trabajar en la oración personal.
Gracias por seguir mis lecturas, Paul Barbé
Pd: está disponible mi Blog en ingles, aunque no está tan actualizado como este, saludos

domingo, 25 de septiembre de 2011

Aybete Fuego Sagrado

Ayer fui invitado por amigos a participar una vez más en una ceremonia guaraní, en esta ocasión para festejar la llegada de la primavera.
Mis amigos querían festejar también la llegada de nuevas semillas puras que trajeron otros amigos de sus viajes, semillas que sembraron en estos días en la chacra. Una lucha para mantener la pureza frente a lo transgénico.
Después de unos meses que no participaba en estas ceremonias, fue un hermoso reencuentro para mí con el fuego sagrado...
Eramos pocos en esta oportunidad, pero nunca se trató de número para que la ceremonia fuera importante o conmovedora.
A medida que nos vamos incorporando al circulo alrededor del fuego, algunos quedan sentados en silencio, otros como yo tomamos algún instrumento y comenzamos a unir nuestro sonido al grupo. Así pasamos un largo rato tocando lo que cada uno siente tocar, con su tambor, su mazo de semillas, sus cuerdas, sus manos... cada uno tocando y armonizando alrededor del fuego, tanto el ritmo como los corazones.
El fuego sagrado nos convoca, la Tierra nos cobija, tanto para agradecer, el alimento de Madre Tierra, el agua pura de nuestra tierra, el viento, la lluvia, las semillas, la cultura recibida de nuestros abuelos, la que debemos preservar.

Mirar el fuego, cosa que todos hacemos, su luz llega hasta el Alma, su calor nos calma, el circulo de hermanos alrededor del fuego nos acerca los corazones, nos muestra nuestros anhelos comunes.
Y así comienza en un momento la rueda de compartir, primero la pipa ceremonial, luego el mate...

Caminar con la pipa alrededor del fuego es una experiencia conmovedora cuando quien lo hace logra conectarse con el fuego, con el grupo, con la energía que se mueve, con el propósito de honrar a esa madre de todos nosotros.

Una ceremonia que sostiene una antigua tradición, que muestra la importancia de cuidar nuestro entorno, la importancia de lo simple de la vida, que señala el gran error del hombre que vive bajo la ambición y el egoísmo social cada vez más aislado y desesperado.

Un pequeño grupo de guerreros de la luz, son mucho más fuertes que cientos de corredores hacia la nada, de maratonistas tras metas ilusorias.

La ceremonia cierra siempre pasando el bastón de la voz, donde cada quien que lo recibe es quien tiene la palabra y será escuchado por todo el grupo, para luego pasarlo a su hermano de su derecha.
Siempre las palabras que se escuchan son un alimento para el Alma, aunque sean pocas y sencillas, siempre son voces del corazón, voces que llegan desde nuestros ancestros y su sabiduría transmitida de boca en boca. 
Algunos logran hablar más que otros, algunos logran trasmitir más, pero todos compartimos lo mejor que podemos entregar.
Todos nos emocionamos, vibramos juntos y siempre ese abrazo final que intercambiamos entre todos muestra la importancia de lo simple, la gigantesca importancia de agradecer a Madre Tierra por darnos todo y afirma nuestro compromiso en cuidarla.
Ojalá cada vez sean más los buscadores que se unan a estos círculos de guerreros de la luz, de guardianes de nuestra madre de todos.
Ojalá encontremos un camino para acercar más hermanos al camino correcto, pues no son los caminantes solitarios los que más progresan, todo caminante debe algunas veces por año reunirse con sus hermanos, aunque sea tan solo para intercambiar un saludo, un abrazo, para sintonizarse con la energía del grupo que lo hará más fuerte.
Son tiempos para buscar unir a los caminantes y guerreros de luz, los caminos silenciosos se encontrarán un día bajo el rayo que el Gran Espíritu nos enviará para bendecir a sus buenos hijos.

Un gran abrazo a todos mis hermanos caminantes, Paul Barbé

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Perdón e introspección

Dos cosas esenciales para vivir mejor o también para alcanzar la paz interior.

Quien no perdona guarda rencor, el rencor retiene un sentimiento negativo o energía negativa, que se almacena en algún lugar del cuerpo. 
Estas energías almacenadas van reduciendo la energía vital del individuo, al tal punto puede llegarse que la persona no pueda sobrellevar en buenas condiciones su diario vivir.
En casos más complejos cuando los rencores son muy fuertes, si estos no son liberados pronto la persona cae enferma. O bien enferma su mente y ya no consigue pensar sin tener en cuenta sus rencores, entonces toda su vida queda condicionada a esa o esas presencias negativas, la vida y el mundo serán malos y nada será suficientemente agradable o favorable para sentirse bien.
Si los rencores, su energía, su sentimiento, se almacenan en el cuerpo, primero formarán contracturas, luego dolores focalizados y con el tiempo se transforman en enfermedades.
Por cualquiera de los caminos en que se localicen estas energías negativas, generan una carrera contra el tiempo, o bien la persona resuelve su conflicto interior o bien termina teniendo una muerte anticipada.

Es como si a una persona se le pide que transporte una bolsa todo a lo largo de una playa. Si esta persona va agregando piedras a su bolsa, la bolsa en un momento puede ser tan pesada que la persona no puede caminar más.

La introspección es otro trabajo que se debe hacer y que normalmente todos evitamos.

Todos hemos vivido desde la infancia, adolescencia, y en toda la vida situaciones mas o menos traumáticas, las cuales hemos resuelto ocultándolas en un rincón oscuro de nuestro ser para poder seguir adelante.
Y tanto como los rencores, cuanto más cosas negativas sin resolver se acumulan, peor se vive.

Si nuestra mente va dejando de lado rincones que no quiere visitar porque allí hay guardados recuerdos dolorosos, estos seguirán ahí, minando la vida. La mente tendrá tantos rincones que evitar, que ¿por dónde circulará un día?

Es un proceso duro tomar cada recuerdo traumático, observarlo, y dejar que vengan los sentimientos que despiertan, pero de todos ellos una vez que los tenemos en el presente veremos asombrados que son tan solo experiencias del pasado, y ¿para qué seguir guardándolos? 
Por lo tanto luego de observada y sentida la podemos liberar y quedarnos con el espacio que ocupaba libre y llenarlo de amor.

Es tan reconfortante alcanzar ese logro que vale por lejos es esfuerzo hecho.

Lograr vivir bien es en esencia aprender a perdonar, para liberarse de la carga que genera no hacerlo. 

Hay una frase conocida que dice: "Puedo perdonar, aunque no olvidar". 
Es un paso, pero aún hay que agregar, "No olvidar puede ser bueno como mecanismo de aprendizaje, o para evitar caer en la misma situación, pero, esfuércese en aprender de esa experiencia, así perdona y la suelta, y queda libre".

Entonces, amigo, si desea vivir mejor, perdone y también intente limpiar su baúl de recuerdos. De lo malo solo retenga su enseñanza.

Desde el punto de vista espiritual el proceso de introspección es vital, a medida que alguien se va liberando de todas las experiencias negativas guardadas, su energía vital no es malgastada y además va logrando conocerse a sí mismo; y así el por qué llegó adónde está hoy como la evolución lógica del proceso de sobrevivir a sus experiencias pasadas.


Cuando logre sacar un viejo trauma de su escondite y ponerlo frente a su conciencia, comprenderá el porqué de cada acción de su pasado, así podrá corregir y mejorar. 
Si logra quitar un viejo trauma, entonces ya no reaccionará automáticamente a causa de él.

A medida que logre retirar más piedras, más liviano estará. Cuanto más liberación, más paz interior; cuanto más paz interior, más luz interior habrá.


Un abrazo a todos, Paul Barbé