Esta vez quiero volver a un tema ya mencionado, los
mantras.
Quiero aclarar que lo que expreso de aquí en
adelante es mi opinión, formada por los años de experiencia en mi camino
espiritual. No por ello pretendo que sea tomado como una verdad sino tan solo
mi opinión.
Los mantras son un grupo de estrofas más o menos
largas, que son repetidas una y otra vez, normalmente un número tradicional de
veces, digamos 3, 7, 21 o 108 veces.
Estos pueden tener o no significado literal, esto
es pues hay algunos que solamente son una combinación de sonidos o sílabas con
el objetivo de alcanzar determinadas vibraciones (vea más adelante el mantra
indígena Sunrise Prayer.
Por otro lado es inútil cantar un mantra traducido,
pues se pierde su combinación de sonidos y la vibración es totalmente distinta
y no produce el resultado esperado.
Los mantras tienen algún poder psicológico y
simultáneamente espiritual.
No es fácil determinar el poder curativo que puedan
tener pues depende mucho de la entrega que realice quien los practica.
Desde el punto de vista psicológico, la ventaja es
clara pues mientras la persona canta sus mantras su mente se apacigua, su
imparable cháchara deja de ser atendida y por lo tanto pierde poder, pues quien
canta sus mantras debe pensar en ellos… y en ese aspecto quizás sea recomendable
recitar aquellos mantras que son más difíciles de recordar lo que obligará a
una mayor concentración.
Paradójicamente, los mantras de mayor poder
vibratorio no son los más largos.
Por otro lado el poder espiritual es indudable que
lo tienen, pero imposible de medir a corto plazo. El canto de mantras es una de
las herramientas más efectivas para el crecimiento espiritual y también el más
fácil de realizar es claro que no es el único trabajo espiritual pero sí
imprescindible.
Debo mencionar igualmente que la oración personal tiene un enorme poder de sanación espiritual, de ese tema ya he hablado en artículos anteriores.
A veces comparo la ventaja que tienen los mantras
frente a las oraciones religiosas, y mi punto de vista es este. Las oraciones
son sólo un recitado memorizado pero carecen de vibración y gran parte de lo
mágico de los mantras es su vibración.
Y por esta misma razón yo personalmente separo el
camino religioso al camino espiritual, considero que el camino religioso donde
la persona se vuelca su responsabilidad como ser a su Dios dejándole a él
todo... amparado en: ayúdame, perdóname, sálvame… es demasiado fácil.
El camino espiritual obliga a un trabajo
constante de entrega, reconocimiento íntimo y honesto de todo lo que se debe
mejorar.
Entonces los mantras son la herramienta para llevar
a la persona a un estado de gran vibración, paz y silencio interior, devoción y
absoluta humildad pero al mismo tiempo con el permanente pedido al Dios
personal que muestre cada día… el camino a seguir y a partir de allí sostener el
compromiso de seguirlo.
Algunos consideran que es en los rituales que
incluyen muchas personas, donde los gestos, palabras y pensamientos adquieren
su máxima eficacia.
Sin embargo yo acepto solo la parte del ritual,
pues la participación en grupos aporta determinadas energías, mientras que el
ritual íntimo tiene más profundidad. Los estados más elevados de vibración son
alcanzados en soledad…
Pero por otro lado es mucho más fácil alcanzar
hermosos niveles de concentración gracias a la energía y apoyo de un grupo,
mientras que por otro lado el ritual íntimo a veces es efectivo sólo para
algunos y en especial para aquellos que han logrado afirmar un hábito de años
de búsqueda.
Tengo la firme convicción que los mantras son
extremadamente poderosos y no tienen efectos secundarios como los
medicamentos... pero si tienen una condición... la dosis.
La dosis me refiero a lo siguiente, recitar un
mantra no hace efecto, recitarlo 20 veces es mejor pero hará más efecto si
quien lo canta lo hace con su mente limpia sólo concentrado en la letra del
mantra, en su entonación o ritmo, en hacer vibrar su cuerpo entero mientras
canta, entonces allí si es efectivo.
Sostengo que es mucho más efectivo cantar 21 veces
un mantra absolutamente concentrado en su letra y su vibración que sólo
recitarlo 108 veces con el único fin de cumplir con un número elevado de veces.
En el ritual diario que aconsejo para todos,
comienza cuando la persona busca su lugar especial de paz, su templo en su
hogar (que no es más que un rincón sagrado y personal) y allí practicar sus
mantras.
Entonces en ese lugar y el momento reservado para
estar sólo, allí aparte del resto del mundo.
Cantar...
La voz guía... transformada en un instrumento de
poder y de amor.
Un proceso de búsqueda íntima para encontrar y
descubrir la mejor entonación adecuada al camino de crecimiento espiritual.
El propio camino diario muestra lo adecuado del uso
de la voz como una herramienta para nuestro crecimiento y bienestar.
Con la elevación de nuestra frecuencia vibratoria…
no quiero decir cantar más alto sino más profundo... más dedicado a esa entrega
tan necesaria, para alcanzar un mayor aislamiento del mundo que envuelve, más íntimo para que la voz llene todo el interior.
La profundidad alcanzada en la meditación del canto
de un mantra, trae paz y satisfacción íntima, cuanto más se puede lograr entrar
en ese mundo de canto mayor será el sentimiento de plenitud, y entonces
sentirnos impulsados a cantar con mayor entrega para regalar lo mejor al
escucha tan especial, el Alma.
Un canto que produce una vibración para sanar,
reconocer y amar.
Con el tiempo el meditador va realizando un
fascinante recorrido a través de antiguos y poderosos mantras que lo va
acercando paso a paso a las distintas puertas hacia estados superiores.
Cántate a ti... cántale a tu Alma...
Ella
siempre te escuchará sin importar tu voz, cuando más grande sea la entrega que
logres en ese canto en un momento comprenderás algo trascendental... La
felicidad no depende del mundo exterior, no depende de lo que nos den los
demás... solo depende del estado íntimo.
Cambiar el estado íntimo por uno mejor es posible
sin importar todo lo exterior.
Cuando más difícil sea la aparente situación,
cuando más desanimado te sientas, cuando más dolido o solo... Cántate a ti,
canta profundo, vibra y tu canto completará todos los huecos y volverás a
sentirte feliz, aunque sea por un instante.
Y si un día aprendes a alcanzar tu felicidad por un
instante cantando... entonces el próximo aprendizaje será prolongar ese
instante... está en ti y en tu dedicación a cuidar tu templo.
Comento solo algunos mantras, especiales para
estados diferentes del ser:
1 - Hay muchas canciones de los indígenas de norte américa que son muy hermosas. Una canción de los indios Sioux,
que yo asumo como un mantra, se llama Sunrise Prayer o sea plegaria del Amanecer, es
extremadamente sencilla y muy especialmente dedicada para quienes tienen dificultades para cantar los
mantras orientales.
La escribo de la forma que se canta.
Aeeee Taahooo taheeee
eeeee tahoooo taheeee
Aaaeee Tahoooo Aiaeehee Tane
Aiahaa Owueeee Ooo He Tona Ouweee
Aiahaa Owueeee Ooo He Tona Ouweee.
Conocí esa canción en 2003 y hasta hace poco no conocía su nombre, así que en aquellos períodos que dejé de cantarla mi memoria la fue modificando, a esta versión, que me traía su recuerdo y a la que sentí agregar algunos sonidos que producían vibraciones que me hacían bien.
“Aaeee aaióóó
aaaéé aiéééé aaeee aioooo (2 veces)
“Suuuíí suuiii ioééé suuii aaiooo suuii aaioooo (1 vez)
“Aaeee
aaióóó áaaéé aiéééé aaeee aioooo (2 veces)
"Mammaéé mamaaiooo mammaee aiooo mammaee aioooo (1 vez)
Continúo con otra bella canción Cherokee, llamada Morning Song
We n' de ya hoooo,
We n' de ya,
We n' de ya,
hooo, hoo hooo hooo
He ya ho he ya,
yaaa yaaa yaaa
2 - "Om
namo bhagavate vasudevaya"
Que
puede cantarse separando de esta forma:
Om na-mo
/ Bha-ga-va-----te / Vasudeva-ya
El significado es "Yo me entrego a la Verdad ".
"Hágase tu voluntad y no la mía,
no me des lo que yo quiero,
sino lo que yo necesito.
Yo me entrego a la Verdad.
Yo invoco y me rindo a lo Divino"
Vasudevaya es el morador. El Alma que existe como
una flama en el centro del corazón sutil. Invocarla es llamar a nuestro propio
poder de conciencia para un mayor
crecimiento espiritual. Ayuda a la
liberación espiritual. Es un mantra para la claridad mental y el desapego. "Me inclino ante el Señor que
vive en los corazones de todo".
3 - Om sri sarveshavaraya namaha
Om sri
param jyotiye namaha
Om sri
jyoti roopaya namaha
Es el
moola mantra o mantra principal de Oneness de India, el significado es: "Saludo al Todo lo que es, saludo a
la luz suprema, saludo al orbe
dorado". Poderoso mantra, aprende a sentirlo mientras lo cantas, no te
preocupes cuantas veces lo repitas, que sean las suficientes…
4 - Om sha ti ananda parabhrama
kurusho
tama paramatma
sri
bagavate save te
sri
bagavata namaha
Hermoso
mantra especial para sentirse en paz, inténtalo, vale la pena.
5 - El mantra más conocido en el mundo proveniente
del Tibet.
"Om
mani padme hum"
Recomiendo muy
especialmente que lo cantes lento… muy lento, vibra con él.
Les dejo ahora una lista de mantras que pueden
encontrar en internet:
Om
sri sarveshavaraya namaha
Om
sri param jyotiye namaha
Om
sri jyoti roopaya namaha
Om
namah shiva(ya)
Om
namo naraianaia
Om
Namo Narayanaya
Gate gate paragate parasangate bodhi suajá
Moola Mantra, Anand Giri
Caribou skin hut dance
chant to the sun
Amazing Grace-cherokee, native american
Navajo healing song
Lakota peyote healing song
Cherokee morning song
Navajo Invocation, Snatam Kaur Khalsa
and the peace family
Una vez que encuentres los mantras o canciones
espirituales que te ayuden más, úsalas diariamente, mejorarán tu vida.
Y por ello te doy mi invitación final es que
busques tus propios mantras, que selecciones aquellos que más te llegan
adentro, que mejor estado te produce cantarlos, que sientas que al cantarlos lavas
con agua cristalina todo tu interior y que una luz brilla cada vez más dentro.
Y que luego de un tiempo a su debido y adecuado
momento, busques otros, pues si creces ya todo será distinto incluso los
mantras... sugiero incluso que compongas tus propios mantras o canciones, quizás así tu Alma vibrará más alto.
Un fuerte abrazo para ti caminante... y que
encuentres tu paz.