martes, 5 de julio de 2011

Mantras y oraciones

Ayer hablaba de la oración personal, he escrito también del esfuerzo diario que debemos dedicar para poder progresar en el camino espiritual.
Muchos tienen inquietudes como ser... si no soy constante en mi tarea espiritual diaria, retrocedo? Mi respuesta es esta: detenerse es no avanzar no significa retroceder, lo sería si la persona incorpora actividades que van en sentido opuesto a un camino espiritual. Pero detenerse o sea dejar de hacer la tarea personal de cada día hace que se pierde el hábito de hacerlo y se pierde la sintonía que se logra en la permanencia.
Pues entonces, cual es la tarea diaria adecuada?
Aquella que se adapta a cada uno, los consejos pueden ser acertados y puede que no, pues solamente cada caminante conoce sus flaquezas y más aún si periódicamente hace sus ejercicios, conocerá a fondo cuáles son sus dificultades.
Entonces, si un camino es muy difícil para llegar a una meta, se debe buscar un camino más largo que para recorrerlo sea más accesible aunque lleve más tiempo.
No es recomendable estirar la cuerda hasta el límite peligroso que reviente, no es recomendable dedicar 10 horas del día a repetir y repetir decenas de oraciones y mantras que significan solo eso un ejercicio vocal que no deja nada más que cansancio.
Puedo yo dar ejemplos de ejercicios, pueden muchos otros maestros hacerlo, pero, lo importante es que el caminante elija con cuidado de todos ellos, cuales puede realizar y además cuales le traen un mejoramiento.
Otro consejo, no es recomendable para el caminante, en ningún momento de su camino pretender subir 20 escalones espirituales en muy poco tiempo, las razones son muchas, pero la más fácil de comprender es que difícilmente lo logre.
La humildad es un componente básico para el caminante espiritual, acaso ahora mismo en este instante no es deseable pensar en que si logramos mantener una rutina en unos días alcanzar un escalón más alto? El tiempo traerá otros logros, paso a paso.
Por otro lado una vez que se sube digamos 3 escalones la perspectiva es distinta, y es posible que esa nueva altura muestre la necesidad de retocar el rumbo que desde abajo no veíamos.
Bien volvamos a los ejercicios, tenemos los más sencillos los mantras, son oraciones cortas, su nombre viene de la india, hay cientos de mantras, hindúes, tibetanos, budistas, en fin, es posible encontrar muchos en internet y recomiendo esto, elije el que te parezca más adecuado hoy, trabaja con él repítelo tantas veces consideres en el día o por los días que sientas..., más adelante agrega otros o cambia de mantra, de eso sólo debes guiarte por tu afinidad por él. Habrá quizás un día que te viene bien un mantra y mañana quizás desees repetir otro, está todo bien.
Las oraciones son distintas, pues son largas, doy como ejemplo, el padre nuestro, puedes repetirlo todas las veces que quieras, pero una oración no debe ser repetida como un mantra, la oración debe ir acompañada a un recitar hacia adentro y al mismo tiempo la mente debe estar enfocada en cada frase de la oración, es una meditación dedicada a esa oración.
Yo aconsejo que cada persona a medida que avanza en su propio y muy personal camino espiritual... intente escribir su propia oración, aquella que exprese humilde y honestamente las carencias o deseos personales, no para otros, sino una oración dirigida a la propia alma de uno mismo, es un diálogo íntimo con el alma, un intento de comunicación con lo más puro que cada uno tiene.
Así sea por ejemplo algo tan sencillo como "ayúdame alma mía a buscar el lado bueno de cada persona y a dejar de mirar sus defectos", inténtalo escribe para ti mismo, corrige esa oración todas los días si es necesario, es muy poderoso el efecto que logra una oración personal.
Asi que, en resumen por hoy recomiendo, busca tus mantras, escribe tu oración, repitelas hasta que logres un avance, luego de un tiempo adapta tus plegarias a tu estado actual del camino.

El camino es tuyo deja que tu corazón y tu alma te guíen.
Un abrazo, Paul Barbé

No hay comentarios: