lunes, 6 de junio de 2016

Vibrando para sanar

Esta vez quiero volver a un tema ya mencionado, los mantras.

Quiero aclarar que lo que expreso de aquí en adelante es mi opinión, formada por los años de experiencia en mi camino espiritual. No por ello pretendo que sea tomado como una verdad sino tan solo mi opinión.

Los mantras son un grupo de estrofas más o menos largas, que son repetidas una y otra vez, normalmente un número tradicional de veces, digamos 3, 7, 21 o 108 veces.
Estos pueden tener o no significado literal, esto es pues hay algunos que solamente son una combinación de sonidos o sílabas con el objetivo de alcanzar determinadas vibraciones (vea más adelante el mantra indígena Sunrise Prayer.
Por otro lado es inútil cantar un mantra traducido, pues se pierde su combinación de sonidos y la vibración es totalmente distinta y no produce el resultado esperado.

Los mantras tienen algún poder psicológico y simultáneamente espiritual.
No es fácil determinar el poder curativo que puedan tener pues depende mucho de la entrega que realice quien los practica.
Desde el punto de vista psicológico, la ventaja es clara pues mientras la persona canta sus mantras su mente se apacigua, su imparable cháchara deja de ser atendida y por lo tanto pierde poder, pues quien canta sus mantras debe pensar en ellos…  y en ese aspecto quizás sea recomendable recitar aquellos mantras que son más difíciles de recordar lo que obligará a una mayor concentración.
Paradójicamente, los mantras de mayor poder vibratorio no son los más largos.
Por otro lado el poder espiritual es indudable que lo tienen, pero imposible de medir a corto plazo. El canto de mantras es una de las herramientas más efectivas para el crecimiento espiritual y también el más fácil de realizar es claro que no es el único trabajo espiritual pero sí imprescindible.
Debo mencionar igualmente que la oración personal tiene un enorme poder de sanación espiritual, de ese tema ya he hablado en artículos anteriores.

A veces comparo la ventaja que tienen los mantras frente a las oraciones religiosas, y mi punto de vista es este. Las oraciones son sólo un recitado memorizado pero carecen de vibración y gran parte de lo mágico de los mantras es su vibración.
Y por esta misma razón yo personalmente separo el camino religioso al camino espiritual, considero que el camino religioso donde la persona se vuelca su responsabilidad como ser a su Dios dejándole a él todo... amparado en: ayúdame, perdóname, sálvame… es demasiado fácil.

El camino espiritual obliga a un trabajo constante de entrega, reconocimiento íntimo y honesto de todo lo que se debe mejorar.
Entonces los mantras son la herramienta para llevar a la persona a un estado de gran vibración, paz y silencio interior, devoción y absoluta humildad pero al mismo tiempo con el permanente pedido al Dios personal que muestre cada día… el camino a seguir y a partir de allí sostener el compromiso de seguirlo.

Algunos consideran que es en los rituales que incluyen muchas personas, donde los gestos, palabras y pensamientos adquieren su máxima eficacia.
Sin embargo yo acepto solo la parte del ritual, pues la participación en grupos aporta determinadas energías, mientras que el ritual íntimo tiene más profundidad. Los estados más elevados de vibración son alcanzados en soledad…
Pero por otro lado es mucho más fácil alcanzar hermosos niveles de concentración gracias a la energía y apoyo de un grupo, mientras que por otro lado el ritual íntimo a veces es efectivo sólo para algunos y en especial para aquellos que han logrado afirmar un hábito de años de búsqueda.


Tengo la firme convicción que los mantras son extremadamente poderosos y no tienen efectos secundarios como los medicamentos... pero si tienen una condición... la dosis.
La dosis me refiero a lo siguiente, recitar un mantra no hace efecto, recitarlo 20 veces es mejor pero hará más efecto si quien lo canta lo hace con su mente limpia sólo concentrado en la letra del mantra, en su entonación o ritmo, en hacer vibrar su cuerpo entero mientras canta, entonces allí si es efectivo.
Sostengo que es mucho más efectivo cantar 21 veces un mantra absolutamente concentrado en su letra y su vibración que sólo recitarlo 108 veces con el único fin de cumplir con un número elevado de veces.

En el ritual diario que aconsejo para todos, comienza cuando la persona busca su lugar especial de paz, su templo en su hogar (que no es más que un rincón sagrado y personal) y allí practicar sus mantras.
Entonces en ese lugar y el momento reservado para estar sólo, allí aparte del resto del mundo.
Cantar...
La voz guía... transformada en un instrumento de poder y de amor.
Un proceso de búsqueda íntima para encontrar y descubrir la mejor entonación adecuada al camino de crecimiento espiritual.
El propio camino diario muestra lo adecuado del uso de la voz como una herramienta para nuestro crecimiento y bienestar.

Con la elevación de nuestra frecuencia vibratoria… no quiero decir cantar más alto sino más profundo... más dedicado a esa entrega tan necesaria, para alcanzar un mayor aislamiento del mundo que envuelve, más íntimo para que la voz llene todo el interior.

La profundidad alcanzada en la meditación del canto de un mantra, trae paz y satisfacción íntima, cuanto más se puede lograr entrar en ese mundo de canto mayor será el sentimiento de plenitud, y entonces sentirnos impulsados a cantar con mayor entrega para regalar lo mejor al escucha tan especial, el Alma.

Un canto que produce una vibración para sanar, reconocer y amar.
Con el tiempo el meditador va realizando un fascinante recorrido a través de antiguos y poderosos mantras que lo va acercando paso a paso a las distintas puertas hacia estados superiores.

Cántate a ti... cántale a tu Alma... 

Ella siempre te escuchará sin importar tu voz, cuando más grande sea la entrega que logres en ese canto en un momento comprenderás algo trascendental... La felicidad no depende del mundo exterior, no depende de lo que nos den los demás... solo depende del estado íntimo.
Cambiar el estado íntimo por uno mejor es posible sin importar todo lo exterior.
Cuando más difícil sea la aparente situación, cuando más desanimado te sientas, cuando más dolido o solo... Cántate a ti, canta profundo, vibra y tu canto completará todos los huecos y volverás a sentirte feliz, aunque sea por un instante.
Y si un día aprendes a alcanzar tu felicidad por un instante cantando... entonces el próximo aprendizaje será prolongar ese instante... está en ti y en tu dedicación a cuidar tu templo.

Comento solo algunos mantras, especiales para estados diferentes del ser:
1 - Hay muchas canciones de los indígenas de norte américa que son muy hermosas. Una canción de los indios Sioux, que yo asumo como un mantra, se llama Sunrise Prayer o sea plegaria del Amanecer, es extremadamente sencilla y muy especialmente dedicada para  quienes tienen dificultades para cantar los mantras orientales.
La escribo de la forma que se canta.
Aeeee Taahooo taheeee
eeeee tahoooo taheeee

Aaaeee Tahoooo Aiaeehee Tane

Aiahaa Owueeee Ooo He Tona Ouweee
Aiahaa Owueeee Ooo He Tona Ouweee.

Conocí esa canción en 2003 y hasta hace poco no conocía su nombre, así que en aquellos períodos que dejé de cantarla mi memoria la fue modificando, a esta versión, que me traía su recuerdo y a la que sentí agregar algunos sonidos que producían vibraciones que me hacían bien.
Aaeee aaióóó           aaaéé aiéééé        aaeee aioooo     (2 veces)
Suuuíí suuiii  ioééé      suuii aaiooo         suuii aaioooo     (1 vez)
Aaeee aaióóó           áaaéé aiéééé        aaeee aioooo      (2 veces)
"Mammaéé mamaaiooo   mammaee aiooo     mammaee aioooo  (1 vez)

Continúo con otra bella canción Cherokee, llamada Morning Song 
We n' de ya hoooo,
We n' de ya,
We n' de ya,
hooo, hoo hooo hooo
He ya ho he ya,
yaaa yaaa yaaa
2 - "Om namo bhagavate vasudevaya"
     Que puede cantarse separando de esta forma:
     Om na-mo / Bha-ga-va-----te / Vasudeva-ya
El significado es "Yo me entrego a la Verdad".
                     "Hágase tu voluntad y no la mía,
                      no me des lo que yo quiero,
                      sino lo que yo necesito.
                      Yo me entrego a la Verdad.
                      Yo invoco y me rindo a lo Divino"
Vasudevaya es el morador. El Alma que existe como una flama en el centro del corazón sutil. Invocarla es llamar a nuestro propio poder de  conciencia para un mayor crecimiento espiritual.  Ayuda a la liberación espiritual. Es un mantra para la claridad mental y  el desapego. "Me inclino ante el Señor que vive en los corazones de todo".

3 - Om sri sarveshavaraya namaha
    Om sri param jyotiye namaha
    Om sri jyoti roopaya namaha
    Es el moola mantra o mantra principal de Oneness de India, el significado  es: "Saludo al Todo lo que es, saludo a la luz suprema, saludo  al orbe dorado". Poderoso mantra, aprende a sentirlo mientras lo cantas, no te preocupes cuantas veces lo repitas, que sean las suficientes…

4 - Om sha ti ananda parabhrama
    kurusho tama paramatma
    sri bagavate save te
    sri bagavata namaha
    Hermoso mantra especial para sentirse en paz, inténtalo, vale la pena.

5 - El mantra más conocido en el mundo proveniente del Tibet.
    "Om mani padme hum"
Recomiendo muy especialmente que lo cantes lento… muy lento,     vibra con él.

Les dejo ahora una lista de mantras que pueden encontrar en internet:
         Om sri sarveshavaraya namaha
         Om sri param jyotiye namaha
         Om sri jyoti roopaya namaha
         Om namah shiva(ya)
         Om namo naraianaia
         Om Namo Narayanaya
         Om sri ramaya namah
         Om sri durgayai namah
         Om sri majá ganapataie
         Om sri majá laksmiai namah
         Om sri janumate namah
         Om aim sárasuatiai namah
         Om tare tuttare ture sohámajá mritiun yaia
         Gate gate paragate parasangate bodhi suajá
         Moola Mantra, Anand Giri

         Caribou skin hut dance
         chant to the sun
         Amazing Grace-cherokee, native american
         Navajo healing song
         Lakota peyote healing song
         Cherokee morning song
          Navajo Invocation, Snatam Kaur Khalsa and the peace family

Una vez que encuentres los mantras o canciones espirituales que te ayuden más, úsalas diariamente, mejorarán tu vida.
Y por ello te doy mi invitación final es que busques tus propios mantras, que selecciones aquellos que más te llegan adentro, que mejor estado te produce cantarlos, que sientas que al cantarlos lavas con agua cristalina todo tu interior y que una luz brilla cada vez más dentro.
Y que luego de un tiempo a su debido y adecuado momento, busques otros, pues si creces ya todo será distinto incluso los mantras... sugiero incluso que compongas tus propios mantras o canciones, quizás así tu Alma vibrará más alto.

Un fuerte abrazo para ti caminante... y que encuentres tu paz.

domingo, 15 de mayo de 2016

La mejor meta de la vida

En este mundo nos encontramos diariamente con un torbellino de confusiones y puntos de vista desencontrados...
Las relaciones humanas son difíciles, sobre todo cuando está en medio de intereses laborales, económicos o materiales.
Las relaciones de amistad son hoy día muy volátiles al igual que las relaciones de parejas.
La mayor parte del tiempo la gente pasa desconforme con lo que vive, con sus relaciones, con lo que tiene, lo que le falta, lo que no podrá tener nunca, en fin...
Todo es un punto de vista personal, pues las metas que nos ponemos en frente las elegimos nosotros...
Si las metas son erradas desde el principio, lo que nos asegura es una frustración más.
Si nuestras metas dependen en parte de otras personas, entonces estamos jugando al azar, pues cada persona en este mundo a su vez se relaciona con otros y así se tejen redes sociales, de esa manera esa red social podrá actuar de una manera por lo general imprevisible.
Ahora, ¿es sano plantearse una expectativa del logro de una meta en esas condiciones? Podría ser sólo en caso que comprendamos desde el inicio que habrá una gran posibilidad que los otros no actúen en favor de esa meta, de nuestros intereses.
Podemos elegir un sin número de metas para nuestro futuro, y es posible que ninguna se cumpla.
Dice el dicho popular "el que mucho abarca poco aprieta"

Las relaciones con otras personas son muy importantes, dado que afectan nuestra vida. De las personas podemos recibir cosas buenas o malas, pero debes tener muy en cuenta que las relaciones que tienes con otros eres tú que elijes tenerlas o no.

Si ya la vida es una dura escuela, ¿que sentido tiene sostener relaciones que nos devuelven cosas negativas?
Abundan palabras en las redes sociales sobre las relaciones de personas, y es importante sacar de ellas lo que es realmente útil y apartarse de lo demás.
Las redes sociales son para muchos una adicción que termina manejando su vida íntima al punto que no pueden pensar en no estar conectados... ¿conectados a que?

Dentro del océano de personas que se vinculan con nosotros a lo largo del camino que recorremos, debemos aprender a buscar y mantener vínculos enriquecedores respecto a la calidad humana y a apartar de nuestro interior el resto.
Las relaciones afectivas son hermosas mientras están sanas, y allí otro tema, si vas a iniciar una relación, primero aprende a ver dentro del otro en vez de ver su exterior, pues no será lo exterior que mantenga una relación afectiva sino la calidad de vínculo entre el interior de ambos.

De las cosas más hermosas de esta vida es el afecto, el cariño y por supuesto el amor, pero lamentablemente humanos somos y no es algo que podamos contar con el para siempre.
En general una relación provechosa es aquella que nos brinda consejos, opiniones útiles, quizás enseñanzas importantes, pero como he mencionado en otros artículos ellos no generarán un progreso en nosotros, de nuestras buenas relaciones podemos tomar el ejemplo, la enseñanza y luego aplicarla para mejorar.
Hasta incluso una relación puede no ser agradable, es decir un vínculo duro, pero aún así es posible que brinde importantes puntos de vista que nosotros mismos no somos capaces de ver.
Sean cuales sean las relaciones que tienes, ellas te empujan a situaciones donde no tienes todo el control, muchas veces llegamos a momentos muy incómodos en nuestra vida, a sufrir a sentirnos perdidos por no encontrar el rumbo a seguir.
Cuando los problemas y los dolores te agobian, no es abandonando el lugar en que estas que escaparas de ellos, pues te seguirán, lo que debes abandonar es tu actitud de vida que te lleva a ellos.
Cuando ya no eres capaz de cambiar una situación... tienes frente a tí el desafío de cambiarte a ti mismo.

¿Te sientes en la gran necesidad de mejorar tu vida?

Si hay algo absolutamente seguro en esta vida es que puedes contar contigo mismo.

El gran desafío personal en tu vida es que sea donde sea que vives, y sin importar con las personas que estás obligado a vincularte diariamente, que esas personas y esas situaciones te saquen lo menos posible de tu centro y afecten lo menos posible tu paz interior.
Y por ello una meta segura, eres tú. Sea como sea que te sientas hoy, en este momento, busca un tiempo de paz personal, a solas, para re pensar en todas las esperanzas y planes en curso... Busca sanar internamente tu relación con esas metas bajo la perspectiva que quizás las cosas no salgan como esperas.
Vivir en este mundo obliga obviamente a tener que relacionarnos con otros para lograr nuestro sustento, pero, por ello no obliga a buscar relacionamientos que generaran estrés, ansiedad, enojos o desilusiones.
Con el paso de los años aprendemos a resignar planes pues un sin número de cosas se atraviesan en el camino y debemos desistir y tratar de olvidar lo inalcanzable...
Al final, cuando aprendemos que lo mejor es soltar todos los aferramientos, a no preocuparnos por metas, salvo las del mejoramiento interior, nuestra vida cambia...

Todo nuestro esfuerzo sobrante, es decir luego que cumplimos con nuestros compromisos diarios en nuestro vínculo con el mundo exterior, es cuando decidimos que hacemos con nuestro tiempo disponible...
Gran parte de ese tiempo será limpiar nuestra mente... liberarla de la cháchara social, liberarla de preocupaciones futuras, liberarla del pasado, e incluso darnos un tiempo para liberarnos de todo...
Es enormemente importante buscar un momento en el día para entrar muy dentro de nosotros, al gran refugio de nuestro Templo Interior donde también está nuestra Alma, y aunque no seamos capaces de dialogar con ella. Disfrutar su cercanía, su silencio, su abrigo y su amor.

Si hay algo seguro en esta vida, es ese refugio interior, obligar a la mente a hacer silencio, a parar su ronda... en el momento que se logra ese silencio en ese mismo instante se siente una plenitud sublime...
Podemos ser felices con tan solo eso, refugiarnos en nuestro interior donde allí está todo el amor disponible para nuestro ser, un amor incondicional y sanador.
Es cierto que es muy difícil alcanzar un silencio total, incluso durante muchos intentos, puede que nos lleve muchas semanas lograrlo, pero la única forma de lograrlo... y en ello nadie podrá entorpecer nuestro progreso... la forma es consolidar la intención de alcanzar el estado de silencio interior, de paz y de amor. Tener la voluntad y el convencimiento que si vale la pena poner todo el esfuerzo posible en tener éxito en esa meta.
Al final entonces, el mayor tesoro que podemos alcanzar en esta vida es... el silencio interior, conectarnos con la luz del universo, sentir y dar amor sin esperar nada a cambio.
Podemos estar rodeados de mucha gente que va y viene en nuestra vida, podrán ser gentiles u hostiles hacia nosotros, pero eso no impide que interiormente estemos felices de disfrutar nuestra luz...
Podemos quizás estar muy...muy solos...pero tampoco impide ser felices, pues para ser feliz no se necesita nada, para sentir amor tampoco y para disfrutar nuestro silencio interior menos aún...

Tan solo...y aunque quizás en este momento suene un imposible... tan solo, enfocar nuestra mente en el divino silencio interior del alma, su paz y su luz y lográndolo, somos felices.

sábado, 30 de abril de 2016

Cuida tu templo interior

Muchas personas viven su vida basados en sus gustos y deseos, cumplen con sus obligaciones sociales y enfocan su diario vivir en el progreso económico.
Pero en el proceso normal de la vida con sus altos y bajos, lo material viene y se va, las amistades también, las relaciones de parejas son cada vez más volátiles.
Cuando todo va bien la mayoría disfruta todo lo que puede sus momentos libres, pero llegará un día en que algo importante se pierda.
La pérdida de un empleo, un accidente, la enfermedad de un ser querido, o de uno mismo. Llegado ese momento de quiebre, el sufrido se encuentra desamparado, pues, las palabras de consuelo no alcanzan... de poco sirve que en las redes sociales recibamos algunas frases de aliento o apoyo, pues el deseo y la necesidad de recibir un abrazo parece imprescindible. Y aún así si dicha persona tiene la fortuna en esta vida de poder contar de seres queridos que sí brinden un cálido abrazo, la crisis no se resuelve...

Una persona que nunca dedicó un momento diario a estar en su Templo y a cultivar su paz interior, que nunca desarrolló su capacidad de rezar o de repetir mantras u oraciones, quizás cantar salmos o de recitar reflexiones espirituales, entonces...
Esa persona en una crisis estará absolutamente sola, pues ni siquiera contará con la companía de sí mismo.
Quien vivió su vida basada en lo exterior el día que el mundo que lo rodea se desmorona, o la persona que considera su inseparable companía se fué, en ese momento no encuentra un lugar apropiado en su propio Templo para intentar dialogar con su Alma, encontrar la gran luz.

Si nunca rezó, podrá recitar oraciones, pero no las sentirá, pues sus oraciones las hará tal cual está acostumbrado a relacionarse en el mundo material. Digamos "cuanto me cuesta resolver esto Dios?" ,"30 padres nuestros?", "8 días de arrepentimiento y plegarias?"

Dijera Buda, ni tus peores enemigos pueden hacerte tanto daño como tus propios pensamientos.

Rezar, orar, cantar mantras o salmos, son útiles cuando ese acto forma parte de un diario vivir y ese hábito es realizado con profunda convicción de que es eso lo que mantiene su Templo interior fuerte.
Es el refugio seguro que nadie te puede quitar, ni la peor enfermedad, ni la peor desilusión o pérdida, el Templo siempre estará, pero estará tal cual se lo ha mantenido. Es como si una persona con una vida pasiva un día tiene necesidad de correr 5000 metros muy rápidamente, aunque su vida dependa de ello, no podrá hacerlo.

Si el Templo fue abandonado y un día por necesidad se entra en él, habría que empezar sacando el polvo, habrá que limpiarlo, ordenarlo y pulirlo. Habrá que aprender a estar en él, solos y en total silencio... y dentro de ese lugar íntimo y sagrado empezar a aprender qué es lo que ese lugar nos puede brindar.
Es un aprendizaje largo, lleva mucho tiempo y dedicación. Así que más vale que todos empiecen ahora a cuidar su Templo ¡ahora!, mientras los tiempos no sean malos.
Pero aún eso no es todo... y felizmente no lo es... pues aquellos que logran persistir en visitar su Templo interior encontrarán allí el verdadero refugio. Allí dentro esta el mapa del verdadero camino a seguir en la vida.
El Templo tiene muchas puertas, pero hay que ir encontrando sus llaves. Quien encontró la primer llave, de la puerta de la paz estará entusiasmado a volver a esa sala cada vez más tiempo y un día encontrará una nueva llave a otra sala de mayor paz u otra sala, pues hay muchas, pero eso es un proceso.
No es el mismo para nadie, tampoco es posible avanzar allí dentro con la ayuda de otros, allí hay que avanzar solos, pero permanecer dentro del Templo es maravilloso, difícil al principio, pero posible de lograr.
Para quienes consideran iniciar su búsqueda les aconsejo esto: sentarse cómodo, no es imprescindible posiciones especiales que obliguen a esfuerzos pues el cuerpo estará incómodo y pronto hará imposible no pensar en ello,  busque una posición sentado de manera que todo el cuerpo pueda estar relajado. Encender un incienso ayuda, una música suave también pero sólo si es adecuada. Para el novicio también es importante que el lugar sea tranquilo donde no sufra interrupciones de otras personas.

La primera vez que realice el intento en forma seria, con suficiente convicción, es muy probable que si logra la suficiente introspección no se dé cuenta que entró en su Templo.
Eso por varias razones por permitir que la mente racional tome las riendas de la visita al Templo, pues allí no hay nada que analizar, tampoco se la necesita para que enumere todos los problemas y frustraciones con que llega el buscador, tampoco repasar la lista de recuerdos. 
Allí dentro no se necesita nada. Solo la presencia de la parte más elevada de nuestra mente , TU YO SOY.
Dejar fuera la mente racional es como quitarse los zapatos para entrar a algunos templos, es un sinónimo de que dejamos el mundo exterior fuera y lejos de nuestra atención.

Una vez dentro, no busques visiones del Templo, si llegan bienvenidas, pero si no percibes ninguna visión realmente no importa para nada. Aunque lo único que percibieras fuera silencio y vacío... ¡lograr eso es maravilloso!
El primer gran paso es justamente alcanzar el silencio, y eso será el día que dejes fuera a tu mente analítica o racional, pues ella es sólo una herramienta que todos desarrollamos para sobrevivir en el mundo exterior, pero es un enorme estorbo allí dentro, será un lastre que impedirá avanzar.
El día que encuentre la sala del silencio, cada vez será más fácil llegar a ella, al volver a ese lugar repetidamente en algún momento podrá encontrar como llegar a la primer sala de la paz interior.
El logro que seguirá será la alegría... de comprender cuan beneficioso es ese camino... de sentirse bien... de comprender que la vida es más sencilla en su simplicidad, libre de ataduras a cosas exteriores. La alegría en haber encontrado ese lugar íntimo, de paz y bienestar, al que podrá llegar y permanecer dentro en cualquier momento o lugar. Se puede entrar tan sólo unos minutos, o una decena de respiraciones, todas las veces que se desee o necesite,  dependerá del hábito de búsqueda, para volver a estar centrado y mejor, para después continuar la jornada.
Quien logra persistir, día tras día, no recibirá premios de otros, sino que habrá encontrado un estado de vida cada vez más completo.
No puedo describir cuales logros irá conquistando cada buscador, pues depende de cada uno.

Con el tiempo ese Templo tan íntimo y personal se convertirá en el principal motivo de vida.

Cada logro alcanzado irá llevando al buscador  a estados cada vez más hermosos. Hasta que un  día alcance a abrir una puerta y encontrarse con su Alma.